El Real Madrid lució menos que otras veces pero sigue ganando y en racha

Resulta evidente que Zidane ha decidido cambiar su estrategia. Sus rotaciones han pasado a mejor vida, al menos por el momento, y el repetir alineaciones salvo mínimos detalles se empieza a convertir en una costumbre. Ante el Granada, mismo equipo que frente al Eibar con el único (y obligado) cambio de Fede Valverde por el lesionado Modric.

Igual que frente al Eibar el Real Madrid empezó como un cohete, dominando y sin dejar respiro al rival, lo cierto es que el inicio ante el Granada no solo no tuvo que ver con lo de hace tres días sino que estuvo a punto de ser de película de terror.

Y es que un error de Varane a la hora de sacar el balón desde atrás, con un pase suicida que interceptó Soldado, terminó en una contra rapidísima que dejó a Puertas complemente solo a la altura del punto de penalti. Fue una pena máxima en movimiento. 25 segundos de partido habían transcurrido. La suerte para Courtois y para el Madrid fue que el jugador del Granada disparó muy alto. Una ocasión clarísima que no tuvo consecuencias pero que sirvió como algo más que un aviso para los de Zidane sobre lo que no podían hacer.

Al Real Madrid le costaba sacar el balón con limpieza. El Granada presionaba arriba a los defensas del equipo blanco y con la ausencia de Modric el frenar a Kroos era una misión más que recurrente para los visitantes. Tácticamente los visitantes lo tenían claro, no permitir que los de Zidane se sintieran cómodos y en caso de que su presión fuera superada, un repliegue medio para dificultar el juego entre líneas.

La primera mitad seguía transcurriendo y pasaban pocas cosas. El Real Madrid no encontraba la meta rival, señal de que ofensivamente tenía problemas. Además, por si esto fuera poco, en una arrancada por la derecha brutal, llena de potencia, Rodrygo se rompió muscularmente. El brasileño se fue el suelo y ya no se levantó. Pidió el cambio al instante. De hecho, se tuvo que marchar en camilla, ni siquiera pudo hacerlo a pie. Una malísima señal. Entró Asensio por él.

Fue el mallorquín, precisamente, quien generó la mejor ocasión del partido para los blancos hasta ese momento. 55 minutos. Un centro lateral de Carvajal lo remató Marco de espuela contra el palo de la meta del Granada. Fue un recurso de genio, merecía el gol. Eso sí, de esa misma jugada el Madrid sacó hasta tres remates seguidos que estuvieron a punto de acabar en gol. Primero, Kroos desde fuera del área, luego Valverde desde el punto de penalti y, por último, Benzema algo escorado. Salvo el tiro del francés, los dos primeros los tuvo que despejar el portero del Granada.

El Madrid había cercado la portería visitante en un minuto más que en los 50 precedentes. Es más, el hecho de que el Granada se hubiera salvado de un gol casi cantado no sólo no desesperó a los blancos sino que les sirvió de aliciente en su búsqueda del 1-0. Asensio iba a ser protagonista, desde esa banda izquierda y en concepto de asistente, con un gran centro al área que encontraría la llegada de Casemiro desde atrás para cabecear la pelota al fondo de la meta de Rui Silva. Los de Zidane eran conscientes de la importancia de este gol porque hasta ese momento el Granada se había mostrado como una pared de granito.

Bajo la misma premisa que le dio al equipo blanco la Liga de la pasada temporada, el Madrid gestionó los minutos finales del encuentro. Conservar ese 1-0 era una obligación, a ser posible sin sufrimiento. Así las cosas, Zidane refrescó algo el equipo metiendo a Isco y a Vinicius en el campo pero con la idea de hacerse fuerte con ese 1-0 sin tener la imperiosa necesidad de lograr un segundo gol. Al entrenador del Madrid le salió bien su apuesta, la de echarle el cerrojo a su marco y hacer que ese gol de Casemiro se convirtiera en decisivo. Es más, en el último minuto Benzema se abrió un hueco en el área para poner el 2-0 con un gran remate para cerrar uno de esos partidos poco lúcidos pero cuyo valor es de más de tres puntos por lo que significa vencer cuando no haces un gran partido.

Ficha técnica

Real Madrid 2: Courtois; Carvajal, Varane, Ramos, Mendy; Kroos, Casemiro, Fede Valverde (Isco 77’); Lucas Vázquez (Vinicius 77’), Benzema y Rodrygo (Asensio 37’)

Granada 0: Rui Silva; Foulquier (Quini 72’), Vallejo (Germán 83’), Duarte, Neva; Eteki (Suárez 62’), Yangel Herrera; Puertas, Luis Milla, Kenedy (Soro 62’); Soldado (Molina 72’)

Goles: 1-0 Casemiro (56’), 2-0 Benzema (93')

Árbitro: Martínez Munuera. Amonestó a Lucas, Foulquier, Carvajal

Estadio: Alfredo Di Stéfano.