Los jugadores se responsabilizaron tras la derrota y consideran que, igual que durante estos años Zizou los defendió contra viento y marea, les ha llegado su turno.
No son horas fáciles en Valdebebas. La eliminación en dieciseisavos de la Copa del Rey ha hecho mucho daño y, por primera vez, en el vestuario entienden que se le acaba el crédito a Zidane. Según ha podido conocer Defensa Central por fuente cercanas al Real Madrid, los jugadores acabaron muy 'tocados' tras la charla del míster y asumieron que deben dar un paso al frente.
Si por algo se ha caracterizado el legado de Zinedine Zidane en el Real Madrid, además de por las tres Champions consecutivas, es porque el técnico siempre defendió (y defiende) a sus jugadores. Nunca los puso en el punto de mira cuando hicieron un mal partido y, aunque le tocara cargar con todas las críticas, se responsabilizaba de las derrotas.
De alguna manera, se puede decir que los jugadores han estado inmersos en una burbuja dónde los focos prácticamente no les apuntaban. Todas las balas iban para Zidane. Sin embargo, tras la situación crítica que atraviesa el equipo, creen que ha llegado el momento de dar un vuelco a la situación.
Aunque Lucas Vázquez ya mostró ante los medios el sentir del vestuario responsabilizando a los jugadores de la eliminación ante el Alcoyano, no hay otra forma mejor para defender a Zidane que en el campo. Y este sábado, contra el Alavés, tienen una oportunidad única.
Todo lo que no sea ganar, dejaría ya a Zidane con una mano delante y otra detrás. Los futbolistas, liderados por Ramos, tienen claro que hay que ganar para quitarle peso de encima al míster. Además, aunque está difícil, no ven imposible una remontada en Liga.
Al vestuario le toca recompensar a Zidane tantos años de sobreprotección. Lógicamente el francés también tiene parte de culpa en todas las derrotas del equipo, pero los que están en el campo son los jugadores. Cada partido, a partir de ahora, será una final.
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