El Madrid se está convirtiendo en un equipo de segundas partes, y sobre todo de minutos finales. Frente al Levante fue la irrupción de Vinicius la que igualó el partido a 3, en Milán, el gol ante el Inter llegó en el 89, y frente al Valencia también hubo que esperar hasta el final para darle la vuelta al marcador.
Todo ello sin olvidar que en el Madrid-Celta que terminó 5 a 2, se fueron al descanso perdiendo por 1 a 2. Por lo tanto fue una gran segunda parte, con 4 goles, la que certificó el triunfo ante los celestes.
La clave de ello está siendo la buena preparación física. Eso querían Ancelotti y Pintus cuando durante la pretemporada les sometían a palizas en los entrenamientos, que llegaran a los partidos en unas condiciones óptimas.
Pero además, en el duelo de este domingo se vio otro detalle bastante interesante. Y fue la actitud de Alaba tras el gol valencianista. El austriaco jugó de nuevo de central, y con el marcador en contra dio un paso adelante.
Le pidió permiso a Ancelotti para soltarse y jugó casi como un mediocentro más, al más puro estilo Ramos. Hay que recordar que con su selección ya ha ocupado esa demarcación, por lo que no le es ajena. (El Madrid 'sufrirá' a Kubo este miércoles)
Su buen toque a la hora de sacar la pelota jugada y su buena conducción de balón hizo que con el 1 a 0 en el marcador tuviera varias 'subidas' desde la defensa hasta la medular.
De hecho, empezó a asociarse menos con los laterales y con Militao, para realizar conducciones rápidas y dividir el centro del campo de un Valencia que estaba ya agotado por la presión intensa que realizaron durante todo el encuentro.
De este modo, el equipo blanco tumbaba líneas mucho más rápido, trasladando el balón hasta el área rival de forma vertiginosa, para volcar el campo hacia allí en busca del gol del empate.
La polivalencia de Alaba
Durante el verano se ha hablado mucho de la polivalencia de Alaba. Pero no ha necesitado mucho para demostrar que pueden rendir perfectamente en varias posiciones. Ya le habíamos visto como central y como lateral, con una solvencia increíble, pero ahora ha añadido si versión de centrocampista, dejando pinceladas que demuestran que es una solución más si Ancelotti lo necesita.
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