Y si hay alguien que se está tomando totalmente en serio este partido es Ancelotti. No quiere relajaciones y lo está preparando con todo el respeto que se merece. Sabe que de conseguir una nueva victoria, serán líderes en solitario, y alejarán los posibles fantasmas del año pasado, que amenazaron, y complicaron, más de la cuenta la clasificación para los octavos de final.
Pero el gol de Rodrygo cuando el partido en el Giuseppe Meazza estaba encaminado al empate, puede ser clave para vivir una fase de grupos más tranquila. En primer lugar porque los italianos deberían ser los grandes rivales en el grupo por el primer puesto. Pero también, porque permite tomarse el partido ante los moldavos con un punto más de tranquilidad.
Aunque tampoco hay que relajarse. Pese a que no son un rival conocido, debutan por primera vez en la Liga de Campeones y por lo tanto es un duelo inédito, ya han demostrado que tienen calidad para complicar cualquier encuentro. Se estrenaron en la primera jornada con un 2 a 0 y seguro que quieren repetir una buena actuación en un escenario tan bueno como el Bernabéu. (Ancelotti se deshace en elogios hacia Zidane)
Pero Carletto va a estar preparado. Y es que ha estado viendo los dos últimos partidos del Sheriff para intentar analizar al máximo al que será nuestro próximo rival. De hecho, a ojos del técnico madridista, es un duelo trampa. Todo el mundo está dando por hecho que el Madrid debería de golear. Pero es un sentimiento más por desconocimiento que porque realmente sea un duelo tan desequilibrado.
Ancelotti considera que pueden dar la campanada en cualquier partido, y ya compara este rival con el 'Gladbach' del año pasado. Por eso quiere todo controlado, sin dejar margen a la improvisación. En estos últimos días que les ha estado viendo, ha visto que son jugadores muy rápidos y físicos, por lo que tener el control del balón se antoja fundamental si no queremos sufrir más de la cuenta.
Y por supuesto, la defensa tendrá que elevar todavía más sus prestaciones. Cualquier fallo, ellos lo van a penalizar, sobre todo entrando por bandas al contrataque gracias a su velocidad y verticalidad. En ataque, Vinicius y Benzema deberán recuperar el gol perdido frente al Villarreal, porque adelantarse pronto en el marcador también ayudará al Madrid a poner controlar mejor el encuentro.
El estreno del nuevo Bernabéu
Al igual que ocurrió en el duelo de hace unas semanas frente al Celta de Vigo, el Madrid vuelve a estrenar el nuevo Bernabéu, en esta ocasión en Champions. Y es que la fanfarria de la máxima competición del fútbol europeo volverá a sonar en el coliseo blanco 580 días después.
Es cierto que el Di Stéfano vivió grandes duelos la temporada pasada, como el partidazo ante el Liverpool en octavos, pero el Bernabéu tiene un aura especial. El equipo ha escrito grandes noches en la Castellana, y es ahí donde se tienen que jugar siempre este tipo de partidos. Si el Madrid es un equipo de Champions, el estadio blanco también.
Por lo tanto, el Sheriff tendrá el honor de estrenar el nuevo estadio, por lo que vivirá un partido histórico por dos motivos, además de este, porque se enfrentará al rey de Europa. Pero Ancelotti no quiere que lo hagan con victoria, por eso ha preparado el partido con todo detalle.
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