Tras una remontada heroica frente al Manchester City, los blancos sacaron el billete para París. Regresan a una final y lo harán contra el equipo al que se enfrentaron la última vez, en un duelo cargado de morbo.
El propio Salah ya se encargó de caldear el ambiente, pidiendo a los blancos como rivales para 'vengarse' de todo lo que ocurrió en Kiev. Lo dijo tras su partido ante el Villarreal y también en sus redes sociales.
Pero, más allá de la revancha que quiera tener el egipcio, sin duda será un partido muy especial para Sadio Mané, que se podría estar midiendo a sus futuros compañeros de equipo.
No es una locura ni una idea descabellada, ya que es el propio jugador senegalés quien lo piensa así, ya que por su cabeza pasa el abandonar el Liverpool para aterrizar en la liga española.
Tiene contrato hasta 2023 y todavía no ha llegado a un acuerdo para renovarlo. De hecho, ya podría haber comunicado a la directiva sus intenciones de cambiar de equipo incluso este próximo verano. (Se hace oficial el fichaje de Haaland)
Pero es que, para Sadio, su gran deseo en jugar en el Real Madrid. Así se lo habría comunicado a su entorno incluso a su agende para que sondee la posibilidad de llegar al conjunto blanco.
Sin duda ese hecho va a poner el morbo en la final del próximo 28 de mayo, ya que se va a mirar con lupa la actuación del atacante africano, buscando algún detalle que pueda tomarse como guiño.
De hecho, no faltarán los críticos que aseguren que si hace un mal partido, habría sido su forma de 'regalarles' el triunfo a los merengues, como un favor para encaminar su fichaje.
El Madrid no considera su fichaje
De todos modos, en la directiva madridista no se plantean fichar a Mané. Con la llegada de Mbappé y la presencia de Vinicius o Rodrygo, tienen jugadores para una larga temporada.
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