El Real Madrid se ha visto algo sometido por las necesidades del Cádiz y el uruguayo no ha podido lucir sus capacidades
Fede Valverde ha vuelto a llegar a final de temporada como un auténtico avión, siendo titular indiscutible y esencial para que el equipo sea muy superior físicamente ante los rivales. Ante el Cádiz, el uruguayo volvía a partir desde el once inicial y su partido ha sido algo discreto comparado con sus últimas actuaciones.
El centrocampista salía como interior, con la espalda cubierta por Casemiro que hacía de ancla y acompañado por la calidad y la calma en la salida de balón de Toni Kroos. Su posición favorita y dónde luce con más superioridad tanto en faceta ofensiva como defensiva.
La primera jugada destacable de Fede Valverde se producía en el minuto 11 tras una arrancada espectacular en área propia para comenzar un contragolpe y su potencia física le permitía ponerse en el área rival, dejando contrarios atrás que no eran capaces de continuar su ritmo. Dejando a Asensio en ventaja para tomar una decisión final.
La primera mitad de Fede Valverde no ha sido digna de destacar y el uruguayo no ha tenido demasiada influencia en el juego. Su participación en los primeros 48 minutos de juego se resume a dos salidas explosivas y a un disparo desde larga distancia donde ha probado suerte.
En la segunda mitad, la superioridad física de Valverde comenzaba a hacerse notable con el paso de los minutos. Donde el Cádiz cada vez tenía más dificultades de regresar tras volcar un gran número de jugadores en el campo contrario ante las necesidades.
Pese a que Fede Valverde estaba comenzando a lucir su superioridad, Carlo Ancelotti ha decidido dar descanso al uruguayo pasada la hora de partido, dando entrada a Dani Ceballos y sustituyendo al uruguayo que no ha tenido su mejor partido en el Real Madrid.
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