Ancelotti asume que va a ser injusto con Rodrygo en la final de la Champions

La temporada de Rodrygo está suponiendo como el año de su irrupción en el Real Madrid. Tuvo un inicio dubitativo en el que no marcaba diferencias, pero en el tramo final del curso está destapándose en su mejor versión. Pocos dudan de su nivel, con 9 goles y 10 asistencias, y a Carlo Ancelotti empieza a temblarle el pulso de cara a la final de Champions League.

Contra el Liverpool merece jugar y ser importante. Carletto ayer volvió a dejarlo claro en la rueda de prensa posterior al encuentro en el Nuevo Mirandilla: “¿Titulares en París? Puede ser, sí. Puede ser que sí o puede ser que no. Los dos van a jugar”, apuntó el técnico italiano en la zona mixta de Cádiz.

Lo cierto es que esta decisión de dejar a uno de los dos en el banquillo le está pesando mucho. El brasileño apunta a ser suplente y dejará a Fede Valverde como titular. El míster así lo da a entender con el posible cambio de sistema de jugar con un 4-3-3 que se adapta al 4-4-2. Solo con la presencia del uruguayo. Y será injusto con Rodrygo, también lo asume.

Rodrygo de revulsivo

El entrenador madridista, eso sí, sabe que también necesita guardarse balas en la recámara por si vienen mal dadas en los primeros 45 minutos. En eso tampoco hay discusión: Rodrygo es el mejor exponente para ello. 

Ya lo demostró en las anteriores eliminatorias contra el PSG, Chelsea o City en esta Champions. Carlo siente que va a ser injusto con el brasileño, porque merece ser titular, pero no le encuentra el hueco definido en ese once y sabe que Valverde es más imprescindible en la elección final.