El arbitraje de Jaime Latre desquició al público madridista.
Los arbitrajes de LaLiga han sido una auténtica pesadilla para el madridismo desde la primera jornada. Los blancos tuvieron que aguantar una cacería arbitral, partido tras partido, y en la última también tuvieron que aguantar un bochornoso espectáculo.
Jaime Latre desquició a los madridistas desde el primer instante del Real Madrid-Real Betis. Uno de los peores trencillas de LaLiga y que hizo alusión a ese hecho en el encuentro que se disputó en el Santiago Bernabéu para cerrar el telón liguero.
El colegiado volvió a dejar su sello y a desesperar con decisiones que solo entendía él ante el asombro del respetable y de ambos equipos. Muy malas elecciones en todas las jugadas en las que debía pitar bien.
No había nada en juego para ningún equipo, pero Latre vistió las mejores galas para desesperar al cuadro de Carlo Ancelotti en el verde. Más allá de las decisiones polémicas con el foco en un disparo de Casemiro que debió ser falta y algo más, además de dos posibles pisotones a Vinicius Jr y Rodrygo Goes dentro del área.
Tampoco lo entendían los propios jugadores. Fiel reflejo la jugada de Ferland Mendy, en ataque, en la que sí que le pitaba falta y le daba el balón al Real Betis. Una acción que resumió el encuentro de Jaime Latre en Chamartín.
En la segunda parte siguió su show y quizá la acción más destacada la dejó en una clara falta a Ceballos en el minuto 79. Imposible, eso sí, enumerar sus constantes errores en el verde. La peor manera posible de cerrar el telón y sin entrar en profundidad dentro de la polémica.
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