Debe resolver las salidas de Marco Asensio y Cristiano Ronaldo, que no están contentos con sus respectivos clubes. Uno porque no se siente importante en la plantilla y se encuentra entre los peor pagados del equipo. En el caso del portugués se debe a la Champions, porque la quiere jugar el año que viene, y los red devils no lograron la plaza.
La FIFA ha aprobado una nueva normativa que limita a los agentes a percibir como máximo un 10% en comisiones. Entrará en vigor a partir de 2023, por lo que esta es la última oportunidad de Mendes para facturar sin control. Y, como ha hecho durante toda su carrera, piensa aprovecharlo.
Se entiende que, a título personal, le interesa agitar el mercado. Aún tiene casos por resolver, pero ya ha cerrado otros como los de Darwin Núñez (Liverpool) y Ángel Di María (Juventus). Son representados por Gestifute también futbolistas de la talla de Bernardo Silva y Rafael Leao.
Le perjudica
Como es lógico, en el Real Madrid no hizo ni pizca de gracia que Asensio cambiará a su representante de toda la vida, quién le llevó al club blanco, por Jorge Mendes. Ahora su renovación continúa enquistada y tiene bastantes papeletas para salir traspasado.
La cuerda está tensa y los últimos contactos con el agente portugués no favorecen al balear si lo que realmente desea es continuar en el Madrid. Se avecinan días cruciales en el futuro de Asensio... y Cristiano. Al '7' le encantaría regresar, pero el club ni se lo plantea, tal y como informamos en DC.
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