Es cierto que la temporada es todavía muy larga y quedan muchos objetivos. La Liga y la Champions volverán a ser los principales, pero en el Bernabéu no piensan tirar ninguno de los que están en juego.
Además, son conscientes de lo que pueden cambiar las cosas si se gana o no. Las dudas y las críticas no tardarán en aparecer, en cambio si se levanta el trofeo, se verá todo desde el optimismo.
Pero no será fácil. Aunque los alemanes eliminaron al Barcelona en los cuartos de final de la Europa League, no hay que sacar conclusiones precipitadas. Entre otras cosas porque son mejor equipo al haberse reforzado.
Además, llegarán a la cita con mejor ritmo que el Madrid. Mientras lo de Ancelotti no han empezado la temporada y tan sólo han jugado 3 amistosos, los germanos ya han disputado la primera ronda de la Copa y este viernes juegan la primera jornada de la Bundesliga ante el Bayern.
Será un buen momento para ver cómo llegan ellos realmente a la cita, y sobre todo para apuntar puntos a favor y en contra que tienen, algo de lo que sin duda Davide estará muy atento.
Pero en el Madrid no existe preocupación por este detalle. Ya hemos visto como, ante equipos más rodados este verano, el conjunto de Carletto no ha sufrido físicamente con ninguno de ellos.
De hecho, en el último encuentro de la gira frente a la Juventus, se mostraron muy superiores en ese aspecto a sus rivales, la mejor muestra de que el trabajo realizado en pretemporada ha sido bueno.
Aun así no habrá que confiarse. En frente está un rival peligroso y a un partido puede ocurrir cualquier cosa. Pero la confianza, cimentada en el trabajo hace creer en que la victoria es posible.
Además, Carletto confiará en el mismo '11' que derrotó en París al Liverpool y conquistó la Decimocuarta, pero si es necesario, en el banquillo esperan Rodrygo, Tchouaméni o Camavinga, por lo que la confianza es total.
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