Francis Cagigao, prestigioso captador y mano derecha de Arsène Wenger durante más de dos décadas en el Arsenal, se fijó en Fede Valverde cuando el uruguayo únicamente tenía 15 años.
Cagigao, uno de los mejores scouters del mundo, convenció a Valverde, a su familia, a su agente y a su club, para tener una primera toma de contacto con el Arsenal en 2014.
De hecho, en diciembre de 2014, con 16 años, Fede Valverde viajó a Londres junto a su madre, su hermano Pablo (mayor que él) y un directivo de Peñarol. Un viaje de 6 días donde estuvieron alojados en el hotel Sopwell House, en Saint Albans, muy cerca del Arsenal Training Centre.
Fede entrenó varios días con los jugadores del Sub-23 del Arsenal y en una ocasión entrenó con el Primer Equipo. Además, le realizaron pruebas físicas que ya arrojaban datos sorprendentes para su edad y su complexión, aún en plena formación.
Este viaje dejó maravillado a la familia del uruguayo como narra As, y el Arsenal aprovechó para dar un paso más. Su negociador principal, Richard Law, se trasladó a Montevideo para terminar de concretar el fichaje con los directivos de Peñarol y con su agente en aquella época, Gerardo Rabajda, un exportero que llegó a jugar en el Sevilla y en Rosario Central.
El Arsenal llegó a un acuerdo verbal pero no se llegó a firmar. El entorno de Fede dio su consentimiento, pero decidió esperar al final del campeonato sudamericano Sub-17 que estaba a punto de disputarse en Paraguay.
Cambio de rumbo
En aquel torneo Fede Valverde fue uno de los jugadores destacados, marcando siete goles con la selección celeste (dos a Argentina, otros dos a Brasil y uno a Chile, Bolivia y Paraguay). Eso le hizo ser segundo máximo goleador del campeonato por detrás del brasileño Leandrinho.
Juni Calafat no dudó y pasó informes inmejorables, recomendando ficharle de forma inmediata. Al final, José Ángel Sánchez, director general, dio el visto bueno definitivo y por cinco millones el Madrid se llevó el pajarito.
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