De hecho, una de las líneas del campo que más miradas centra es la defensa. Es cierto que en las últimas dos campañas han llegado Alaba y Rüdiger, dos piezas que han dado mucha más solidez.
Pero el próximo verano podría haber una revolución con cuatro piezas clave que provocarían cambios importantes. Lo primero es que se puede producir la marcha de Nacho y de Ferland Mendy.
En el caso del madrileño acaba contrato y todavía no ha renovado. Su futuro está en el aire y no se sabe qué va a suceder con él. Mientras que el francés siempre ha provocado un rumor sobre su posible marcha. (Las decisiones del Madrid en el mercado)
Si esto sucediese, en especial la salida de Ferland, el Real Madrid tiene casi decidida la llegada de Fran García. El lateral del Rayo está dejando muy buenas sensaciones, sobre todo las dos últimas temporadas en primera división.
El club blanco tiene el 50 por ciento de sus derechos, por lo que el coste de la operación no sería muy elevado. De este modo regresaría un jugador que salió del Castilla, y que se ha formado en la élite.
Pero también implicaría que Alaba volviera al lateral, una posición que ha alternado, sobre todo esta temporada con la llegada de Rüdiger, y que a partir del curso que viene dejaría en manos de Militao y el germano.
Sin embargo, todavía quedaría por ocupar el puesto de tercer central. Si Alaba deja de serlo, y si Nacho se marcha, haría falta otro jugador para el eje de la defensa, y ahí la opción de Gvardiol pasaría a ser la favorita.
No es nada fácil
Aunque es factible, es un puzle complejo, con operaciones por definir... pero el Madrid no descarta absolutamente nada, sobre todo porque no ve imposible que se lleven a cabo estos movimientos.
El de Gvariol podría ser el más costoso, y no sólo por el precio que va a exigir el Leipzig después de su gran Mundial, sino por la gran competencia que van a tener por el croata.
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