Ancelotti hace lo que ningún entrenador: tiene 'enfadados' a dos jugadores… titulares

Carletto y uno masterclass de como 'dominar' a un vestuario lleno de hambre


Carlo Ancelotti y sus jugadores

Carlo Ancelotti y sus jugadores




El Real Madrid llega al ecuador de la temporada con un título en el bolsillo, con su mejor momento de forma en lo que vamos del 2023 y con un equipo donde la bajas obligan a hacer sacrificios de todo tipo. Carlo Ancelotti, primero en ser consiente de una actualidad blanca que pese al ‘enfado’ de dos titulares, sigue dando sus resultados sobre el terreno de juego.

El calendario aprieta, las lesiones se acumulan y el Rey de Europa pronto volverá a convivir con la Liga de Campeones junto a LaLiga en su día a día, por lo que hay que arrimar el hombre y buscan un bien común donde las individualidades pasen a segundo plano. No hay lugar para satisfacer las necesidades que parte de la plantilla pueda tener en este Real Madrid 2023.

La victoria ante el Valencia, marcada por esos y agresiones que nuevamente tuvo que sufrir el conjunto blanco en un terreno de juego, mostraron igualmente a diversos activos del primer equipo en una posición que pese a sus espectaculares rendimientos, lejos esta de ser favorita. Ancelotti ya sabe esto de primera mano, así como que sus hombres le seguirán hasta el final del camino.

Todos en la misma línea

Ni Nacho o Eduardo Camavinga, laterales por estas jornadas gracias a las bajas de Lucas Vázquez, Dani Carvajal, David Alaba o Ferland Mendy, gustan de jugar en una demarcación más que lejana a ese centro de la defensa que tanto gusta al canterano o esa medular donde el joven francés se siente como pez en el agua. Carletto sabe de los deseos de sus pupilos por volver a su lugar de ‘comodidad’, pero no hay lugar ahora mismo para otra cosa que no sea tirar todos juntos del carro.


La primera plantilla se encuentra más que unida y pese a no querer rendir lejos de su puesto, seguirán las órdenes de Ancelotti al pie de la letra. El dominio de los ‘egos’ y de personalidades más que fuertes como la de Nacho o Camavinga, otra muestra de ese masterclass en gestión de seres humanos que tanto se le aplaude a Carletto.