En el tiempo de descanso lo hablaron indignados: "No es normal...". Vinicius, siendo el futbolista que más faltas recibe (89), tiene más amarillas (8) que Gavi, el que más hace de toda LaLiga (53), con apenas (5) cartulinas.
Una auténtica barbaridad que no tiene justificación alguna. En LaLiga, los colegiados muestran la amarilla con facilidad al jugador que no deja de encajar entradas. Sin embargo, se muestran permisivos con los infractores, como Gavi, quién lidera el ránking de faltas.
Ancelotti lo denunció en rueda de prensa, tras ganar al Espanyol: "Me ha parecido hoy ejemplar su actitud. No ha protestado, no ha dicho nada, ha jugado muy bien. Está claro que le han enseñado demasiadas amarillas para las patadas que recibe".
Hartazgo
De hecho, el club permitió a Vinicius que hablase con las televisiones y pusiera el foco en este grave problema: "Siempre pasa esto. No puede ser que sea el que más faltas recibe y el que más tiene. Los árbitros sacan la tarjeta cuando ya han hecho 15 faltas y en 89 minutos. Para eso mejor que no saquen y tenemos más tiempo para jugar".
Circunstancia que no sucede en Europa. Parece que sólo en España los árbitros prefieren sancionar al jugador que da espectáculo. Protegiendo, eso sí, a los que se pasan los minutos haciendo faltas. De lo contrario, es imposible explicar que Vinicius tenga 8 amarillas y Gavi, del Barça, sólo 5.
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