El presidente merengue nunca entrará en una operación en la que los únicos beneficiados sean los parisinos.
El 'caso Mbappé' sigue siendo una novela con muchos episodios por vivir, algo que irá a más en los próximos días con el cierre del mercado de pases.
El mundo del fútbol continúa atento a este conflicto entre el parisino y el club francés, que ha acaparado todas las miras de los aficionados durante todo el verano.
La interminable polémica con el futbolista siempre ha sido un fuerte dolor de cabeza para Nasser Al-Khelaïfi y el emir Tamim bin Hamad Al Thani, quienes no se esperaban todo lo vivido cuando le ficharon.
Esto hizo que los responsables deportivos del PSG quisieran repetir una operación que el AS Monaco hizo con ellos cuando dejó partir al de Bondy.
En la negociación entre los monegascos y los parisinos, los dirigentes del equipo de Principado incluyeron un bonus de 35 millones de euros si el futbolista se marchaba antes de finalizar su contrato o extendía el vínculo.
Algo a lo que tuvieron que hacer frente Nasser Al-Khelaïfi y el emir Tamim bin Hamad Al Thani cuando renovaron a Kylian Mbappé.
Esta estrategia ha querido ser repetida por los dirigentes parisinos en una futura negociación de traspaso y que, lógicamente, subía la cifra del traspaso incluyendo las primas a las que el jugador no ha querido renunciar.
Desde el Real Madrid no han pensado nunca en entrar en ese juego, ya que estarían a merced de Nasser Al-Khelaïfi y el emir Tamim bin Hamad Al Thani, en una jugada en la que ellos siempre saldrían ganando.
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