Las dudas sobre la continuidad de Kepa en la portería del Real Madrid han quedado totalmente despejadas. Carlo Ancelotti considera al arquero vasco como el titular en la portería con la lesión de Thibaut Courtois y el partido contra la Real Sociedad ha probado sobradamente. Kepa fue protagonista desde el principio: hizo todo lo que pudo para evitar el gol de la Real Sociedad, bloqueando el disparo a bocajarro. El segundo rebote también lo detuvo, pero la tercera oportunidad fue demasiado y el equipo visitante se adelantó en el Bernabéu.
El '25' no tuvo muchas fases de actividad, con sus compañeros lanzados y preparados para asediar la portería de Remiro durante todo el partido. Sin embargo, los despistes en defensa y la rápida salida a la contra de los pupilos de Imanol Alguacil pusieron en aprietos a la defensa blanca, totalmente desarbolada por un eléctrico Take Kubo que anotó el segundo gol, anulado por fuera de juego de Oyarzábal.
Su intervención volvió a ser clave para evitar el segundo tanto de la Real Sociedad en el primer tiempo con paradas de valor gol para mantener al Real Madrid a tan solo un tanto del empate. Cuando las fuerzas se equilibraron, para el final de la primera mitad, Kepa actuó como el distribuidor de juego cuando los pupilos de Carlo Ancelotti construían desde atrás.
Su mejor partido hasta ahora
Los primeros ataques de la Real Sociedad en el segundo tiempo no amenazaron directamente la portería defendida por el '25', que comenzó a disfrutar de cierta tranquilidad en comparación con la primera parte. El gol de Joselu sirvió como antídoto al empuje txuriurdin y Kepa se quedó definitivamente en su papel de distribuidor de juego siempre que el Real Madrid intentó sacar el balón jugado.
El descenso del ritmo del partido y el cansancio hizo que los pupilos de Carlo Ancelotti se relajaran en fase defensiva, cometiendo algún que otro error que forzó varios córner y situaciones de peligro en las que el '25' tuvo que intervenir hasta con los puños, negando la posibilidad del remate a un jugador de la Real Sociedad en un lance ocurrido al borde de los 80 minutos de juego. Más allá de estas acciones esporádicas, Kepa dio por concluido el encuentro con un segundo tiempo con menos acción pero igual de intranquilo que el primero.
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