El Real Madrid fija su mirada en Arabia: tiene grandes 'gangas' en el mercado

Aymeric Laporte y Jordan Henderson muestran que ni mucho menos Arabia Saudita tiene motivos para festejar por estas horas. El primero dejó duras críticas para el macroproyecto liderado por Riad mientras el segundo ya sea un Ajax de Ámsterdam tras solo 6 meses por la Liga emergente de Oriente medio. Más casos pueden repetirse en los próximos meses y el Real Madrid estará atento a ellos.

Desde hace poco más de dos años qué Arabia Saudita ha buscado quedarse con uno de los principales lugares mediáticos a la hora de hablar del deporte más popular del planeta. Se invirtieron centenares de millones de euros y se hicieron promesas tan ambiciosas como simplifica antes de lo que se buscaba. Apenas un semestre después del primer gran desembarco de estrellas desde Europa algunas de estas ya miran con deseo a las que eran sus casas en el pasado.

Los casos del defensor vasco e igualmente del mítico capitán del Liverpool suponen solo algunos de los ejemplos que muestran cómo la adaptación al fútbol Saudí está lejos de ser amable en todos los sentidos. Hay dinero de sobra para que cada jugador que apueste por el proyecto se baña en oro, así como el miedo a una fuga de talento de la que clubes como el Real Madrid podrían estar más que atentos.

Gabri Veiga, a seguir de cerca

El ex mediocampista del Celta de Vigo sonó para el conjunto blanco a lo largo de los últimos meses y todo esto antes de que Arabia se quedase con sus servicios. Es solo uno de los nombres a los que habría que estar más que pendiente si es que Riad se ve forzado a detener su plan de expansión y por ende abre la puerta a diversos talentos que se anunció su proyecto a lo largo de los últimos meses. Sacar alguno de estos pupilos de Oriente medio ni mucho menos será tan costoso como lo que fue llevarles hasta ahí.

Sadio Mané, Veiga, Firmino, Fabinho o Koulibaly son nombres pensando en el verano que se hacen interesantes si pueden salir como opciones de mercado. El Real Madrid y todos los grandes de Europa se encuentran atentos a las primeras fugas de talento desde un territorio Saudí que pese a contar con todo el dinero del mundo no parece terminar de completar la adaptación de sus estrellas.