El turco volvió a ser protagonista y el brasileño ajustició a la Real Sociedad
El primer partido tras un parón de selecciones siempre es complicado. El Real Madrid ha visto como muchos de sus jugadores se marchaban para jugar con sus países, y lo peor es que son varios los que han regresado tocados.
Contratiempos a los que se tenían que sobreponer después de haber empatado ante Mallorca y Las Palmas, por lo que los merengues buscaban el primer triunfo fuera de casa en Liga, que hasta ahora se ha resistido.
Para ello en liza Ancelotti ponía un ‘11’ con jugadores como Brahim, Güler y Modric, con la clara intención de mantener la posesión de balón el mayor tiempo posible, buscando darle velocidad al juego.
Habían mejorado la imagen ante los donostiarras, sin embargo los goles no llegaban, mientras en defensa se libraban gracias a los palos, hasta que Güler enganchó un balón suelto, disparó y provocó el penalti.
Esta vez fue Vinicius el que asumió la responsabilidad, y aunque Remiro acertó el lado y estuvo a punto de detenerlo, ajustó tanto el disparo que acabó dentro de la portería para adelantar al Madrid
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