Polémica en Mestalla
El Valencia se adelantó en el marcado tras una buena primera parte y tras una falta no pitada sobre Rodrygo. Esta circunstancia ha llevado a que el Madrid salga con una marcha más en el segundo tiempo. De hecho, los de Carlo Ancelotti, en los primeros minutos, contaron con un penalti para empatar el partido; Bellingham fue el encargado de lanzar la pena máxima. Sin embargo, el inglés no estuvo acertado y falló el penalti. La repetición reflejó que el portero del Valencia no tenía los dos pies sobre la línea, algo que provocaría la repetición del lanzamiento.
No obstante, para sorpresa de muchos, Soto Grado y el VAR no hicieron repetir el penalti de Bellingham. Iturralde, en plena retransmisión, ha explicado lo siguiente: Este año ha cambiado. Sólo se repite el penalti si el que entra forma parte activa en el juego, aunque entre por el otro lado. Y si el portero está adelantado y no la toca, no se repite, porque no la para el portero. Esta es la razón por la cual no se llevó a cabo la repetición de la pena máxima. Por tanto, parece que, en esta ocasión, el colegiado del encuentro acertó.
Sin embargo, el arbitraje está dejando mucho que desear. Recordemos que en el primer tiempo el gol del Valencia no debió subir al marcador por falta previa sobre Rodrygo. Además, también hubo un penalti muy claro en una acción de Vinicius. Dos acciones que marcaron claramente el devenir del encuentor. Para rematar la faena, Soto Grado expulsó a Vinicius después una simulación descomunal del portero del Real Madrid.
Pese a la acción del penalti, nuevo atraco que sufre el Real Madrid. Soto Grado, un viejo conocido, la ha vuelto a liar. Hemos asistido a una actuación vergonzosa por parte del colegiado.
Se acaban los calificativos para definir el trato arbitral que recibe el Real Madrid en todos y cada uno de sus encuentros, y más cuando juega en Mestalla. La historia se repite.
SECCIONES
2024 © Defensacentral.com