El Real Madrid sufrió una dura derrota en la final de la Supercopa ante el FC Barcelona por 2-5.
Como era de esperar, Carlo Ancelotti no introdujo ningún cambio en la alineación del Real Madrid para la final de la Supercopa. La apuesta del técnico blanco, con los ‘tocados’ Valverde y Bellingham, fue la misma que ante el Mallorca tanto en nombres como en sistema.
El partido arrancó con el Real Madrid en ese bloque bajo que ya había anunciado Ancelotti en los minutos previos y defendiendo peor de lo deseado. De hecho, el Barcelona tuvo dos ocasiones muy claras en cuestión de 3 minutos, ambas bien resueltas por un Courtois que empezaba a ponerse la capa de Superman para los blancos.
La buena noticia para el Real Madrid fue que, tras ese mal inicio, a la primera que tuvo, golpeó a su rival. En una contra lanzada por Vinicius y acelerada por Mbappé, el equipo blanco puso el 1-0. Kylian, que sigue demostrando su mejoría, encaró a Balde, se marchó de él y definió ante Szczesny con un toque cruzado. AL contrario de lo que le pasó en la Liga, la primera que enganchó la metió. Lo celebró a lo grande.
Eso sí, aún con la alegría del gol en el cuerpo, Mbappé se llevó una mala noticia. En otra carrera, en la que fue dejando atrás rivales como en sus grandes noches, el delantero francés se llevó un golpe de Koundé que, unido al mal estado del césped, le dejó en el suelo y le obligó a que se acabara vendando el tobillo porque no estaba nada cómodo.
A pesar de ir por delante en el marcador, las sensaciones defensivas del Madrid no eran buenas. Y se fue notando con el paso de los minutos.
La consigna del bloque bajo y del pelotazo no le iba a dar mayor premio durante una primera parte en la que el Real Madrid fue claramente a menos, y lo que es peor, sus propios errores le fueron condenando en forma de goles en contra.
Y es que en poco más de 15 minutos, los comprendidos entre los minutos 21 y 38, el Real Madrid recibió tres goles en los que fueron retratados diferentes jugadores. En el primero, mal Mendy y Tchouameni, que le hicieron ‘pasillo’ a Yamal. En el segundo, Camavinga regala un penalti absurdo que acaba transformando Lewandowski. Y en el tercero, el agujero entre Lucas y Tchouameni, una autopista, fue una invitación al gol de Raphinha. El cuarto gol ya fue el remate, en el último minuto, en pleno descuento y con un córner a favor, el Madrid volvió a meter la para en un intento de dejada de Rodrygo para Valverde que se le quedó corta y permitió un contragolpe rival que Balde acabó metiendo en la meta de Courtois. La guinda a una nefasta primera parte del Real Madrid.
El arranque del segundo tiempo fue una continuación de la pesadilla para el Real Madrid. En otro nefasto error defensivo, con Tchouameni volviendo a demostrar que no es central, Raphinha iba a poner el quinto de la noche. Un mazazo brutal tras lo que Ancelotti hubiera podido comunicar al descanso.
El Real Madrid estaba tocado, hundido. Prácticamente K.O. Aún así, un hilo de esperanza se asomó en el horizonte del equipo blanco después de que Mbappé forzara la clara expulsión de Szczesny. El francés, el mejor de los blancos de largo, se escapó en otra gran carrera hasta que el portero le tumbó. El VAR llamó la atención de Gil Manzano y expulsó al meta polaco.
Fue precisamente en esa falta a Mbappé cuando el Real Madrid logró recortar diferencias. Rodrygo aprovechó que Iñaki Peña acababa de entrar al campo para tirarle hacia su palo y sorprenderle. Al partido le quedaba más de media hora y el rival estaba con 10 jugadores. La afición madridista soñaba con una remontada algo más que épica.
A pesar de contar con la ventaja numérica, el Real Madrid no daba la sensación de poder meterse realmente en el partido porque no encontraba la forma de hacerle daño a su rival. Ancelotti tampoco ninguna tecla que cambiara la dinámica del encuentro y las ocasiones de gol brillaron por su ausencia. Al final, el marcador ya no se movería más. Una noche para olvidar del Real Madrid y un aviso para Ancelotti de cara a su futuro. Se puede perder, sí, pero no de esta forma.
Ficha técnica
Real Madrid 2: Courtois, Lucas (Asencio 51’), Rudiger, Tchouameni (Modric 63’), Mendy (Fran Gaarcía 75’), Camavinga (Ceballos 46’), Bellingham, Valverde, Rodrygo, Vinicius (Brahim 75’) y Mbappé
Barcelona 5: Szczesny; Koundé, Cubarsí, Iñigo Martínez (Araujo 28’), Balde; Marc Casadó, Pedri, Gavi (Iñaki Peña 58’); Raphinha, Lamine Yamal (Olmo 58’) y Lewandowski
Goles: 1-0 Mbappé (5’), 1-1 Lamine Yamal (21’), 1-2 Lewandowski (p.36’), 1-3 Raphinha (38’), 1-4 Raphinha (45’), 1-5 Raphinha (47’), 2-5 Rodrygo (60’)
Árbitro: Gil Manzano. Amonestó a Camavinga, Iñigo Martínez, Tchouameni, Lewandowski, Asencio, Araujo. Expulsó a Szczesny
Estadio: King Abdullah
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