Vinícius cumple su parte pero se queda fuera de la remontada en el Bernabéu

El delantero brasileño tuvo un impacto decisivo en el partido

Vinícius
Vinícius

Vinícius Jr. salió de inicio para hacer frente al Celta de Vigo en los octavos de final de Copa del Rey, un partido en que reanudó su racha goleadora.

Vinícius Jr. fue uno de los elegidos por Carlo Ancelotti para salir de inicio en el partido contra el Celta de Vigo. El futbolista verdeamarelo, pese a los fallos tácticos comprobados durante la final de la Supercopa de España, escapó el inicio del encuentro sin recibir los silbidos de la grada. Pero arrancó como si lo hubiera hecho, prodigándose en los esfuerzos defensivos e intentando abarcar más campo del que, teóricamente y por su posición, le correspondía.

El paso del tiempo hacía imposible derribar el buen planteamiento defensivo colocado por Pablo Giráldez, por lo que Vinícius empezó a acercarse más a la línea de creación. Poco duraron esos esfuerzos, ya que Kylian Mbappé tornó a la banda izquierda… obligando al ariete de São Gonçalo a asomarse a la zona propia de un delantero centro.

Vinícius tuvo poco protagonismo durante los primeros compases del partido, siempre vigilado y encerrado entre los centrales celestes. La constante entrada de Kylian Mbappé por la banda izquierda dejó muy ‘suelto’ al ‘9’ merengue, a pesar de que siempre encontraba el tiempo necesario para regresar a su demarcación natural. Especialmente en los momentos de repliegue y las transiciones hacia la portería del Celta de Vigo.

Inconstante pero preciso

Fue en uno de esos embates, a punto de llegar al descanso, cuando tuvo su ocasión más clara en la primera mitad: el disparo raso, casi forzado, llegó fácilmente a las manos de Iván Villar. Esa jugada fue un calco de otros intentos previos en los que el delantero brasileño se emparejaba con hasta dos defensores gallegos. Logró superar esas marcas en la mayoría de las ocasiones pero sin resultados tangibles de cara a la portería rival.

La segunda parte empezó con un esquema similar al ofrecido en la primera parte. Apenas habían pasado tres minutos cuando se desató una jugada excelente en el campo del Celta de Vigo. Un regate de Mbappé dio pie a un excelente servicio a Brahim. El ‘21’ marroquí aguantó el balón y sirvió un pase medido y raso al ‘7’, que llegaba en carrera. Aplicando el interior de su bota derecha, no perdonó para batir por bajo a Iván Villar y firmar el 2-0 en el marcador.

Apareció cuando se le necesitaba

Estuvo el atacante merengue muy cerca de firmar un golazo. Una mala salida de balón del Celta propició un robo de Brahim Díaz: replicando su gol anterior, el ‘21’ marroquí cedió el esférico a su compañero… quien improvisó una vaselina. Ese envío de ‘cucharita’ estuvo cerca de rebasar la línea de gol, pero Starfelt llegó antes para impedir un tanto de bandera. Vinícius aprovechó con efectividad, pasada la hora de partido, los espacios que aparecían en la defensa del Celta de Vigo. Tampoco dudó en asistir a Arda Güler para lo que hubiera sido el 3-0 en el marcador… pero el VAR había detectado que la acción estaba en fuera de juego y, por tanto, la diana del turco no debía subir al luminoso.

El desenlace del partido no fue benevolente con Vinícius. El desconcierto de sus compañeros ante el empate del Celta de Vigo se alargó durante la primera mitad de la prórroga. Cansado y ligeramente fuera de situación, Carlo Ancelotti decidió sacarle del choque en el descanso de la prórroga para dar entrada a Rodrygo Goes… y mantener las mismas funciones competitivas que durante el resto del choque.