El centrocampista inglés estuvo involucrado en la jugada del tanto madridista
El Real Madrid se adelanta en el marcador en el mejor momento posible. Justo cuando los pupilos de Carlo Ancelotti estaban sufriendo el constante asedio del RB Salzburgo, un contragolpe sobre la portería rival desató la locura en las gradas del Santiago Bernabéu. La transición rápida, de derecha a izquierda, terminó con un centro de Vinícius.
Jude Bellingham estiró la pierna para intentar controlar, pero solo consiguió dejar tocado el balón… para que su compañero verdeamarelo usara el interior de la bota derecha y enviara a una guardar un disparo cruzado muy complicado de desviar. La celebración ya clásica de Rodrygo, que además aprovecha este momento para reivindicarse en un escenario de gran calado, estuvo acompañada de una anécdota.
Porque Jude Bellingham fue participante necesario de la jugada que colocó por delante a la entidad merengue en su propio estadio. “Esta me cuenta como asistencia aunque ha sido sin querer”, le recordó el ‘orgullo de Birmingham' al delantero natural de Osasco durante la piña de varios jugadores blancos. Esa descripción parece ajustarse a la realidad de la jugada.
Si bien el centro original, con la intención de encontrar tanto al propio Bellingham como a Rodrygo Goes, fue lanzado por Vinícius… el último en tocar la pelota antes que el extremo diestro del Real Madrid no es otro que el mediapunta inglés. Por tanto, a nivel estadístico, se entiende que Jude Bellingham habilita y facilita a Rodrygo la ocasión de gol.
Aunque parecía un remate complicado, el atacante carioca lo ha sabido resolver a la perfección. Esta diana conseguida en el ecuador de la primera mitad es mucho más importante de lo que parece. No solo es un ‘balón de oxígeno’ para el Real Madrid en medio del constante dominio de los visitantes austríacos, sino que también coloca a su responsable en el punto de mira.
Sobre todo después del buen partido que ofreció, en el coliseo merengue, contra Las Palmas. Carlo Ancelotti tomó nota de su desempeño y ha decidido confiar en él para un compromiso en el que hay mucho más que tres puntos en juego. El Real Madrid se marchó al descanso con una importante ventaja de la mano de un jugador que no ha tenido muchas titularidades desde que llegó Kylian Mbappé.
Sea como fuere, Rodrygo Goes no ha parecido darle mucha importancia a ese telón de fondo, sumado a los rumores de traspaso lejos del vestuario del Santiago Bernabéu, que le acompañan desde la final de la Supercopa de España. De nuevo el exdelantero del Santos demuestra que puede aparecer cuando su equipo más lo necesita: en la Champions League.
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