"Es una condena monstruosa que, por supuesto, vamos a apelar", dijo a Efe Mandard, autor del artículo publicado por el vespertino francés el 7 de diciembre de 2006. El diario y el periodista fueron condenados también a indemnizar con 30.000 euros al médico de la entidad blanca, Alfonso del Corral. El reportero, que también apeló en enero de 2008 una condena similar dictada por un juzgado español tras una denuncia presentada por el Barcelona, afirmó que, en ambos casos, está dispuesto "a llegar al Tribunal Europeo de Derechos Humanos" si fuera necesario.
Para Mandard, la sentencia de los tribunales españoles muestra "que el fútbol es intocable" en materia de dopaje, como ya declaró el doctor italiano Giuseppe d'Onofrio durante el juicio por tráfico de sustancias dopantes en la Juventus de Turín. "Nadie puede investigar sobre el botiquín de un club de fútbol", afirmó el galeno transalpino, una frase retomada por Mandard. El periodista mantuvo que la información publicada en su diario era auténtica, cuando señalaba que había visto "documentos confidenciales" redactados a mano por el doctor Fuentes sobre los "planes de preparación" para la temporada 2005-2006 de Barcelona, Real Madrid, Valencia y Betis.
"Hemos roto un tabú y ahora quieren rompernos la crisma", ironizó el reportero. Mandard y "Le Monde" fueron condenados en Madrid por no haber "desplegado una diligencia exquisita para comprobar la veracidad de la noticia", según la sentencia divulgada por el club de la capital de España. En su artículo, Mandard sostenía que en Fuentes le mostró documentos en los que aparecían indicaciones similares a los que se encontraron en otros incautados por la Guardia Civil en el marco de la "Operación Puerto" y que muestran una serie de siglas y de signos que se identifican con la utilización de productos dopantes.
La publicación de esa información provocó una gran conmoción en el fútbol español, que hasta aquel momento había quedado al margen de los rumores sobre dopaje.
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