Buen ojo en el mercado invernal

Lass y Huntelaar son los dos últimos ejemplos de la capacidad de acierto





Máximo riesgo en época navideña

Los analistas del fútbol conocen sobradamente los numerosos contratiempos que surgen con la contratación de un jugador en el mercado invernal. Históricamente, los técnicos y presidentes se muestran reticentes a abrir sus carteras y extender cheques con el frío invernal puesto que la adaptación, la escasez de margen de maniobra y la necesidad de un rendimiento inmediato, complica en exceso cualquier movimiento en este sentido. Una época proclive al riesgo y que muchos comparan con una ruleta.

La gran mayoría de transacciones llegan del mercado sudamericano (lo que limita su adaptación) o rebotados de un equipo que no les dio la regularidad deseada. Todo ello pone en tela de juicio cada una de las contrataciones efectuadas en temporada navideña aunque algunos como el Real Madrid se mueven plácidamente en ese terreno pantanoso para la gran mayoría. Rapidez de negociación, grandes observadores y pensar en aportaciones a medio-largo plazo, son las tres pautas a seguir. El Madrid ya explota una filosofía que le ha dado grandes resultados.

Nombres propios del madridismo

El fichaje más acertado en este periodo invernal fue, sin ninguna duda, el de Savio Bortolini. El extremo zurdo llegó como estrella desde el Flamengo, donde había roto estadísticas junto a Romario y Edmundo. Su zurda dejó destellos, goles y regates de primer nivel en Chamartín pero, sobre todo, un dato que demuestra su importancia. Savio es, aún hoy, el único refuerzo invernal que llegó a los 100 partidos con la camiseta del Real Madrid.

Otra gran aportación la ofreció Christian Panucci. El comodín defensivo de la escuela azzurri (es capaz de jugar de central y lateral aunque en su etapa como blanco sólo lo hizo en la banda), estuvo tres campañas en el Bernabeu, a donde llegó como petición expresa de Fabio Capello, su particular mentor en los banquillos. Los Suker, Mijatovic y Morientes aún le están agradeciendo las incontables asistencias desde su banda. Un bregador con carácter y experiencia que aún hoy sigue arrimando el hombro (a sus casi 36 años) en la Roma. Uno de los defensores más rentables de la última década.


Uno de los jugadores que con más cariño recordará su paso por el Real Madrid será Christian Karembeu. El de Nueva Caledonia vivió un auténtico drama para dejar la Sampdoria, de la que incluso fue apartado por su trato hacia el Madrid, al que no le ocultó sus intenciones hasta lograr vestirse de blanco. Y nunca lo podrá olvidar porque en 1998, pocos meses después de su llegada a Chamartín, le llegó su coronación. Fue clave para ganar la Séptima (metió gol en semifinales ante el Dortmund), se anotó el Mundial de Francia con su selección y hasta cerró el año con la Copa Intercontinental.

Zé Roberto, que ha triunfado allá por donde pasó, no consiguió regularidad debido a un problema fiscal que obligó al Madrid a su venta. El brasileño, aún activo en Múnich, ha demostrado sobradamente su calidad y que aquél refuerzo iba muy bien encaminado.

Los últimos grandes aciertos

Desde Sudamérica, con una gran inversión económica a sus espaldas y buscando un rendimiento de cara al futuro, llegaron hace ahora dos años tres jóvenes perlas. Gago, Higuaín y Marcelo. Todos han tenido que pelear duramente por un hueco en el once inicial, han pasado grandes crisis y han tenido que soportar críticas que, siendo tan jóvenes, les han hecho progresar dentro y fuera del césped. Ahora, aún en época de crecimiento y con muchas tardes de gloria por delante, el ‘trío’ asume su rol y afronta el futuro con grandes expectativas.

Las dos últimas adquisiciones han sido, al menos hasta ahora y por la imagen que reflejan de cara a futuras previsiones, todo un acierto. Huntelaar suma seis goles consecutivos en sólo diez partidos jugados, con lo que el ‘cazador’ ha hecho olvidar a Van Nistelrooy y se asoma a la Liga como uno de los grandes rematadores del continente. Lass, sin embargo, se ha quitado en apenas dos meses la etiqueta de experimento y desconocido para convertirse en un jugador indispensable. Un auténtico todoterreno que emula al mejor Makelele y eso, como bien saben en el Bernabeu, ya es mucho decir.

Así pues, donde la gran mayoría encuentra un ejercicio de máximo riesgo y arbitrariedad mercantil, el Madrid aprovecha para renovar su plantilla y reforzarla de cara al futuro. ¿Quién dijo miedo en Navidad?