El calendario favorece al Madrid

Y es que, en los poco más de dos meses que quedan del campeonato, al Real Madrid le quedan once encuentros y a excepción de la jornada 32 -que se juega entre semana-, los de Juande gozarán de una semana completa para preparar cada partido de Liga. En el otro lado está el Barcelona que, con prácticamente los mismos rivales en la competición liguera, podría disputar hasta seis partidos más que los merengues entre la Champions League y la Copa.

Pero no es sólo la acumulación de partidos la única desventaja de los hombres de Guardiola, sino cómo han quedado colocados. Sólo hay que ver el cuadro inferior para darse cuenta de los 30 días tan complicados que deberá afrontar el equipo blaugrana entre la segunda quincena de abril y la primera de mayo. En esas cuatro semanas se jugará su ser o no ser en las tres competiciones en las que está inmerso, pues se suceden los choques contra Sevilla, Valencia, Real Madrid y Villarreal con la final de Copa y con unas hipotéticas semifinales de Champions situadas justo en la misma semana que el Real Madrid-Barcelona de Liga.

La única posible ventaja que les concede el calendario al cuadro culé es que recibirán en el Camp Nou a equipos duros como el Sevilla y el Villarreal, mientras que el Madrid tendrá que visitar el Sánchez Pizjuán, Mestalla y El Madrigal. Eso sí, el gran clásico del fútbol español se disputa en el Santiago Bernabéu. Para entonces el título de Liga puede estar en juego, y no hay mejor escenario posible para los intereses del Real Madrid.