Una vez que las relaciones institucionales con el Bayern se han suavizado tras la venta del extremo holandés al equipo bávaro, qué mejor momento que éste para intentar acometer el fichaje del que sería la gran guinda del proyecto galáctico de Florentino Pérez, Franck Ribéry. A pesar de que el conjunto ya cerró con el representante del jugador un precontrato por el cual el francés jugaría en el Bernabéu la próxima temporada, desde las oficinas de Concha Espina no se descarta ahora traer al jugador antes del lunes, día en que se cierra el plazo para fichar.
RIBÉRY, DISPUESTO A DAR EL PASO
Varios son los motivos que hacen pensar que la operación puede salir adelante. En primer lugar, y la más importante de todas, es que el futbolista sigue dejándose querer. Ha sido habitual a lo largo de estos últimos meses escucharle decir que quiere venir al Real Madrid. Y la última vez que se refirió a esta posibilidad fue esta semana, cuando aseguró que su fichaje por el equipo blanco alegraría sobre todo a su compatriota Zinedine Zidane, quien también está detrás de las negociaciones.
El otro motivo que nos hace pensar su posible llegada a la capital de España es su incompatibilidad en el equipo bávaro con su nuevo compañero Arjen Robben. La posición ideal de ambos es la de extremo izquierdo, por lo que se nos hace muy dificil pensar que Louis Van Gaal haya fichado a su compatriota para dejarle en el banquillo. Y más aún cuando Ribéry ha mostrado su disconformidad a la hora de jugar en la posición de mediapunta, demarcación que ha ocupado estos últimos partidos.
HASTA EL 31 DE AGOSTO NADA ES DESCARTABLE
En definitiva, conociendo a Florentino Pérez y a Jorge Valdano, no es descartable que antes del 31 de agosto se saquen un nuevo conejo de la chistera para satisfacer a una afición que está encantada con los jugadores que han llegado este año al club. Y ya que soñar es gratis, ¿se imaginan un ataque formado por Kaká, Cristiano, Benzema y Ribéry?. En Barcelona ya han hecho pedidos de Dodotis por si acaso...
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