El Real Madrid se ha llevado los tres puntos en sus últimas tres visitas a la ciudad costera con unas victorias que se han visto refrendadas por una progresión constante en cuanto a goles anotados se refiere. Así, los blancos cosecharon un 0 a 1 en la temporada 1996/97, un 0 a 2 en la 97/98 para terminar endosándoles, más recientemente, un 0-4 en la campaña pasada. Si las matemáticas funcionan, y las cuentas no me fallan, el Madrid debería ganar este sábado, al menos, con una "manita" sobre los de Manuel Preciado. Dos inconvenientes: primero, el fútbol pocas veces hace caso de las estadísticas; y segundo, aunque las estadísticas resultaran ser forofas de los "merengues", la plaga de bajas en la delantera madridista hace difícil, cuanto menos, pensar en una goleada.
Lo que sí parece previsible es que los de Pellegrini puedan traerse un resultado positivo, esto es, un empate, ya que los sportinguistas no consiguen hacerle un gol al Madrid desde la temporada 94/95, fecha en la que obtuvieron su última victoria ante los blancos, precisamente por uno a cero.
En definitiva, tenemos unos números que resultan favorables a los madridistas, una plaga que tratará de romper la racha "merengue" a base de garrotazos y lesiones y una afición y equipo rojiblanco que tratará de demostrar que, como el tabaco, el fútbol es una de las principales causas de las estadísticas.
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