Albania se avergüenza del apagón

Fue el partido internacional más largo en la historia del país





El partido, que en principio, debía haber servido para mejorar la maltrecha imagen de Albania, logró el efecto contrario por el apagón en el estadio y otras zonas de Tirana. "Gracias Real...Perdonad por la vergüenza" titulaba este jueves el incidente el periódico "Sporti Shqiptar". "Se apagan las luces en el partido Gramozi-Real Madrid. Vergüenza nacional. El Gobierno deja al Real en oscuridad", abrió el rotativo "Shekulli".

Agrega que el Real Madrid ganó por 2-1 y recibió 2,5 millones de euros por un partido, el más largo de la historia de los encuentros internacionales del fútbol albanés, que duró tres horas y media. Los futbolistas más caros del mundo, Kaká y Cristiano Ronaldo, nunca había imaginado que vivirían un apagón en un estadio en ruinas, comentó el diario, que considera el hecho un escándalo y una vergüenza para toda Albania, que rara vez puede jugar contra un equipo tan famoso como el Real Madrid.

Ofrecen 2,5 millones de euros "para hacer publicidad a la oscuridad de Berisha" (el Primer ministro), escribe el diario "Tema", que afirma que por esta elevada cantidad los madridistas aguantaron hasta terminar el partido. "Un juego distinto sin luces, el Real encuentra en Tirana...la oscuridad", escribe el periódico "Sport Ekspres".

Valdano quería que el equipo se retirara


Tras un empate a uno en el primer tiempo y cuando los jugadores habían entrado en la cancha para empezar la segunda parte, se apagaron las luces que iluminaban el único estadio internacional albanés de fútbol, el "Qemal Stafa", construido por los italianos en los años treinta del siglo pasado. Al principio se creyó que el corte era parte del programa de la fiesta pero cuando los jugadores entraron en los vestuarios protegidos por numerosos agentes de policía, los 15.000 espectadores se dieron cuenta de que no se trataba de una broma.

Irritados por tener que esperar 90 minutos a oscuras el retorno de la luz, la afición empezó a tirar petardos, gritar e incluso prender fuego a las gradas para protegerse del frío. El que no perdió la paciencia durante estos minutos caóticos fue el presidente del Real, Florentino Pérez, que desde un bar iluminado dentro del estadio insistía en que el equipo debía esperar y proseguir el partido.

Son cosas que "pasan en todas partes del mundo", explicó el presidente madridista, que consideró la jornada un día de fiesta para su club. Quien parecía más apurado era Jorge Valdano ya que al cabo de pocos minutos del apagón empezó a pedir a Florentino Pérez que el equipo blanco abandonara el estadio.

Ambos ejecutivos se comunicaban continuamente con Rezart Taçi, el magnate albanés del petróleo y el organizador del trofeo futbolístico "Taçi Oil Cup". También estaba en el bar el ministro albanés de Energía, Dritan Prifti, que se sintió avergonzado por el incidente y declinó ver el segundo tiempo desde el palco.

Fuente de la imágen de portada: realmadrid.com