"La teoría es muy bonita, pero luego hay que llevarla a la práctica. Si les das el balón, lo pagas. Nuestra premisa es tener el balón, luego debemos saber qué hacer con el balón y, lo último, es tener pegada. Eso es lo más importante, pero luego hay que saber hacerlo. Queremos hacerles daño", ha apuntado.
Asimismo, ha señalado que su equipo debe intentar quitarle "la posesión" al Madrid. "Hay que tener la salida de balón clara y terminar la jugada en el arco contrario. No podemos permitir al Madrid que salga a la contra, porque cuando recupera en zonas de peligro tienen mucha pegada arriba", ha añadido.
Pochettino, en este sentido, ha indicado que no es "osado de antemano" pensar en la victoria. "Nos enfrentamos a un gran rival y mucha gente dirá que tenemos pocas posibilidades. Vamos con toda la ilusión de conseguir un buen resultado. Debemos tener un buen rendimiento individual y colectivo", ha manifestado.
Pochettino no piensa sus jugadores acusen el habitual miedo escénico. "No pienso que a estas alturas tengamos miedo. Tengo buenas sensaciones antes del partido aunque sabemos que nos enfrentamos a uno de los mejores de Europa, que tiene grandes individualidades", ha declarado.
El entrenador considera que la juventud de la plantilla no debe ser un inconveniente para el Espanyol. "Debemos tratar de quitarle trascendencia al partido, que los jugadores sientan menos presión y que no tenga una repercusión mayor. Tienen que divertirse y disfrutar", ha remarcado.
Ánimos para De la Peña
Pochettino, por otra parte, ha señalado que le da igual si finalmente Cristiano Ronaldo puede jugar el partido. "Tampoco nos va a condicionar o cambiar mucho nuestra propuesta futbolística en el Bernabéu", ha añadido. El técnico blanquiazul, además, ha reconocido que le preocupa las expulsiones que ha sufrido Facundo Roncaglia. "Debemos tener cuidado con este tipo de situaciones. Los jugadores tiene que aguantar. Roncaglia no tiene tanta experiencia y debe adaptarse. Tiene una forma de jugar demasiado agresiva pero lo vamos a corregir".
El entrenador, por último, ha recordado la victoria lograda en la temporada 1995-96 cuando él todavía era jugador. "Lardín metió dos goles e hicimos un partido muy serio. Mi hijo vio el partido el otro día conmigo y me dijo que pensaba que jugaba un poco más. "Vaya patadas pegabas", me comentó. Lo cierto es que me hizo gracia", ha sentenciado.
Por último, ha enviado un mensaje de ánimo a Iván de la Peña, quien pasará por el quirófano y estará entre dos y tres meses de baja. "Atraviesa una situación muy desagradable. Él está sufriendo y poco podemos hacer. Le estamos brindando nuestro apoyo", ha concluido.
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