Tras su victoria del domingo ante el Real Valladolid en el Nuevo José Zorrilla (1-4), Manuel Pellegrini concedió un día y medio de descanso a sus jugadores antes del duelo frente a los asturianos. El partido del sábado, en el que los blancos buscarán mantener su pleno de triunfos esta temporada en el Santiago Bernabéu, donde suman 13 victorias, será el primero en casa tras la eliminación en la Liga de Campeones ante el Olympique de Lyon del pasado miércoles.
Los madridistas caminan con paso firme al frente de la clasificación liguera, pero el sábado deberán superar el veredicto de la afición tras el severo varapalo europeo. La sesión de mañana servirá para confirmar la evolución de los lesionados, Benzemá y Drenthe, a los que el pasado sábado se unió Kaká, que no pudo viajar a Valladolid con una contractura, y habrá que esperar para confirmar si están listos para el sábado o para el derbi del próximo jueves 25 ante el Getafe en el Coliseum.
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