Xabi aterrizó en Madrid como un jugador obsesionado con el pase y sereno a la hora de liderar grandes equipos yendo de menos a más a lo largo de la temporada. Desde el primer partido se convirtió en el referente del mediocampo madridista, era el jugador al que todos buscaban para dar salida a la pelota desde atrás, un hombre fundamental en cualquier equipo y Pellegrini lo sabía.
Sin embargo, con la camiseta blanca, el tolosarra evidenció la falta de velocidad de algunos de sus compañeros quedándose solo en determinados momentos de la temporada, algunos de ellos clave. La mala temporada de Kaká o el pasotismo de Lass ha deslucido un poco el trabajo de Xabi, un trabajo que se veía reforzado con el papel que realizó Van der Vaart, que en un principio partió como secundario.
Los números de Xabi Alonso en la temporada 2009-10 se resumen en 34 partidos disputados en los que ha salido siempre como titular y cuatro goles, algo que se antoja algo escaso, pues el madridista posee una diestra envidiable con un potente disparo como demostró en su etapa en la Real Sociedad o en el Liverpool.
Ausencia en la vuelta de la Champions
La ausencia de Xabi en el partido que el Real Madrid disputó en Gerland, en el que el donostiarra vió una tarjeta amarilla que le haría perderse el partido de vuelta en el Bernabéu resultó determinante. En principio, era una ausencia importante pero que el equipo madridista podría suplir con la entrada de Lass o Mahamadou. Sin embargo, se notó y mucho esta ausencia, pues el Lyon apeó a los madridistas de la competicion continental.
Tras una temporada de aclimatación a la ciudad y la filosfía madridista, se espera mucho de este jugador que parece que llevará la manija y el tempo del mediocampo del Madrid durante muchos años.
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