Cristoph Metzelder ha disfrutado de su último año como jugador del Real Madrid de una manera poco participativa, ya que solamente ha podido jugar dos partidos de Liga y el fatídico 4-0 ante el Alcorcón. Por lo que tres apariciones en una temporada no es un bagaje muy positivo para una despedida del club, y menos aún, para un análisis de su temporada. Como dato a tener en cuenta, en los dos choques que jugó en la Liga BBVA los blancos ganaron sin encajar goles, algo importante cuando hablamos de un defensa central.
El alemán regresará la próxima campaña a jugar en su país natal y volver a sentirse importante como futbolista. Su destino será el Schalke 04, rival acérrimo del club de su corazón, del que fue una estrella, el Borussia de Dortmund, por lo que habrá polémica con su llegada.
Antes de finalizar la temporada, Metzelder, muy querido y respetado dentro de la plantilla blanca, así como por la afición gracias a su comportamiento ejemplar, invitó a comer a los que han sido sus compañeros los últimos tres años en un detalle que ejemplifica su carácter.
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