Y es que el galo, que ya se encuentra junto a sus compañeros de selección, tuvo que abandonar el entrenamiento de la selección francesa tras sufrir la entrada de un compañero que le lastimó el tobillo derecho.
Fue en un partidillo de seis contra seis en el que Benzema recibió un fuerte golpe que le obligó a recibir la asistencia de los fisioterapeutas y médicos franceses. En primer término se le protegió la zona afectada con hielo aunque no pudo acabar la sesión y tuvo que retirarse de la misma. Pese a todo, en principio, parece que no tendrá problemas para disputar los partidos ante Bielorrusia y Bosnia-Herzegovina.
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