El Real Madrid afronta la ida de los dieciseisavos de la Copa del Rey ante el Murcia con tres rivales en la cabeza: el propio Murcia, entrenado por Iñaki Alonso, la maldición que sobrevuela sobre los blancos en estos partidos durante las últimas temporadas y el césped, impracticable incluso para el equipo local.
El verde del estadio grana presentará un aspecto cuanto menos irregular. Tan grave es el caso que los propios jugadores del Murcia se quejaron de la situación del césped en el último partido ante el Estepona: "Se levanta mucha arena y así es casi imposible jugar". Iñaki Alonso, que también se ha apuntado a las quejas sobre el mal estado del tendido, tiró de ironía cuando le preguntaron por la eliminatoria con el Madrid: "Ojalá siga así cuando vengan Ronaldo y compañía".
Y así ha sido. El césped no estará bien mañana martes, aunque los operarios están trabajando para que el terreno de juego llegue lo mejor posible. Desde luego, no ayuda que el Murcia entrene hoy a doble jornada.
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