Octubre, el mes que le cambió la suerte a CR7

El portugués también fue protagonista de excepción ante el Hércules





Septiembre no había sido un mes bueno para Cristino Ronaldo. El portugués tan solo había conseguido perforar la portería en dos ocasiones: ante la Real Sociedad de falta directo, aunque para ello contó con la inestimable ayuda de Pepe, y ante el Espanyol desde el punto de penalti. Pero lo más preocupante no era su mayor o menor acierto de cara al gol, sino un estado de ansiedad que le hacía jugar sólo para él, sin tener en cuenta a sus compañeros, lo que le llevó a ganarse las críticas de algún sector del madridismo.

El de Madeira llegó a escuchar incluso algunos pitos durante el transcurso del encuentro ante el Deportivo de la Coruña. Esa fue la señal que puso en estado de alerta al portugués, y partir de entonces todo encuentro que jugaba siempre marcaba al menos un gol. Ante los coruñeses ya fue capaz de anotar dos goles, los mismos que consiguió anotar ante el Málaga en La Rosaleda.

Entre medias de estos dos partidos hubo otros tantos con su selección, Portugal, ante Dinamarca e Islandia, y en ambos choques consiguió marcar un tanto en cada uno de ellos. En Champions consiguió abrir la lata ante el Milan de lanzamiento de falta, y contra el Racing de Santander vivió una noche inolvidable, ya que fue capaz de marcar cuatro goles, la primera vez que lo hacía en su carrera. En Murcia no tuvo la fortuna de marcar, pero los crack como él no suelen fallar en dos partidos seguidos, y ante el Hércules cerró el que sin duda ha sido el mes más frucífero de su carrera