Y la mejora se palpa al analizar los números que consiguió Benzema la pasada temporada con el conjunto blanco y los que lleva cosechados en ésta. El año pasado fue realmente complicado para el jugador. Fue su primera experiencia profesional no sólo en el extranjero, sino prácticamente fuera de la que es su ciudad natal, Lyon. Le costó mucho aclimatarse al ambiente del Real Madrid, la ciudad, el idioma…Y todo eso se tradujo en un rendimiento nada acorde con lo que se pagó por él en su traspaso: 35 millones de euros.
Pese a que empezó la temporada como titular indiscutible, Higuaín le ganó muy pronto la partida en esa posición, y su participación en la segunda vuelta del campeonato fue prácticamente escasa. En los 33 partidos oficiales que jugó en total sólo fue capaz de marcar nueve goles (ocho en Liga y uno en Champions), y participó decisivamente en otros seis tantos del equipo.
Gracias a José Mourinho los madridistas están disfrutando de otro Benzema. Cuando tan sólo se lleva disputado un tercio de la competición oficial, el galo lleva tan solo tres goles menos de los que hizo cuando estuvo a las ordenes de Manuel Pellegrini. Su ‘hat - trick’ ante el Auxerre le ha ayudado a engrosar unas cifras goleadoras que, a pesar de su evidente mejora, son aún algo pobres para lo que se le debe exigir a un delantero del conjunto blanco.
Pero a Benzema no sólo hay que mirarle los cuatro goles que lleva en Champions y los otros dos repartidos en las dos principales competiciones nacionales (Liga y Copa del Rey) sino que también hay que fijarse en cuántas jugadas ha participado que finalmente acabaron en gol. Y es que en cuatro de los goles anotados por algunos de sus compañeros en lo que llevamos de temporada la participación de Karim fue determinante, y si a este dato le sumamos las dianas que lleva marcadas el ex del Lyon, vemos que en diez de los goles del equipo madridista Benzema ha estado presente directa o indirectamente.
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