“Metodo: nadie gana/nadie pierde”

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          En enero de 2011 el entrenador José Mourinho se rebeló y explotó públicamente contra Jorge Valdano, después de comprobar que su interlocución no llegaba al presidente, creando casi un estado de excepción por lo desacostumbrado de los hechos.

Justo la misma queja que Pellegrini esgrimió a final de la temporada pasada, después de haber sido despedido: “Tenía que haber hablado con el presidente…” Evidentemente esa estructura de poder no le resulta operativa al entrenador portugués y Florentino ha tenido que “achatar” su organigrama protector.

Es decir, quitar el escalón intermedio del Director General Adjunto a la presidencia y su estructura colateral. Al pan, pan; y al vino, vino. Justo lo que en 1996 yo recomendaba a Jorge Valdano como entrenador es lo que Mourinho hace ahora, “… ser más exigentes en la composición de las próximas plantillas, ya que los medios deben adecuarse a los objetivos”; agravado por la lesión de Higuaín hasta fin de temporada.

 Con todo, Jorge Valdano ha estado torpe, lento y burocratizado, creando una lucha de poder dañina para el propio club. La pérdida de imagen pública ha sido evidente y le puede costar ámbitos de poder incluso ganas de abandonar su misión.

De hecho, el presidente, ahora, se ha quedado sin muñidor frente a la presión de Mourinho. Este declaró recientemente: “Yo no hablo de fichajes con Valdano. Reporto directamente con el presidente…”

          Me hubiera gustado que este serio problema de relación se hubiera resuelto con el “Metodo: Nadie gana/nadie pierde” que una vez recomendé a Juanma Lillo en su conflicto con el presidente Pepe Hidalgo.

 Pero tampoco en aquella ocasión sirvió porque los hechos ya estaban muy enconados. No obstante, lo recuerdo sintéticamente por si les sirve a otros. Algunos conflictos son inevitables y nos dejan dos tareas: Descubrir cómo reducirlos al mínimo y cómo resolver lo que no es posible evitar. El método “Nadie pierde” consiste en convertir el conflicto en cooperación. La solución trae la satisfacción mutua de las necesidades. De niños, lo usábamos siempre De ahí los métodos diferentes:

          - Método I: “Yo gano, tú pierdes”.

          - Método II: “Tú ganas, yo pierdo”.

          - Método III: "Nadie pierde".

          El presidente Florentino Pérez debiera reflexionar seriamente, pero ya hay una evidencia: Valdano y Mourinho se deben relacionar horizontalmente (Colaboración mutua) y no en una estructura jerárquica entre ambos (Yo mando y tú obedeces). Este conflicto, típico de grandes organizaciones, también de las pequeñas, sucede porque el líder carismático llega a creerse que lo controla todo, reparte obligaciones a manos llenas pero no delega poderes suficientes para conseguir los objetivos.

 De paso, se cree que comprando voluntades todos se pliegan a una obediencia ciega, sin que nadie deba opinar. Ese riesgo era evidente con Mourinho, y éste exige a los de arriba del mismo modo que a los de abajo.

Lo que a la gente de a pie les encanta… Definitivamente, Mourinho quiere ganar con más ahínco que el propio Florentino Pérez, pero requiere los medios humanos a tiempo… Por lo que se cumple la eterna premisa a veces olvidada: ¡Ten cuidado con lo que pides, que a lo mejor te lo dan…! Y en esa máxima van a estar comprometidos, tanto el presidente como el entrenador.