Y es que el ex del Werder Bremen está teniendo un papel muy destacado en todas las parcelas ofensivas del equipo. Como mediapunta que, lo primero que se le debe exigir a un jugador como el alemán es que dé asistencias de gol a sus compañeros, y en este apartado está cumpliendo con creces. En total lleva dadas 15 asistencias (10 en Liga, 4 en Copa y una en la Champions), lo que le convierte en el mejor del Real Madrid en esta faceta. Pero es que aún hay más, y es que sus pies nacieron hasta 83 ocasiones de gol desperdiciadas por sus compañeros. Unos datos que vienen a corroborar que, cuando el balón pasa por los pies de Özil, el espectáculo está garantizado.
Pero Mesut no solo vive de sus pases. Es un jugador con una tremenda llegada a la portería rival, y ahí lo demuestran los diez goles que hasta el momento lleva marcados (6 en Liga, 3 en Copa y uno en Champions). No es una faceta en la que hasta el momento hubiera destacado en el Werder Bremen o en la Selección alemana, pero el hecho de estar jugando junto a otros buenos pasadores como Xabi Alonso, Di María o Benzema le permite a él también culminar las buenas acciones de sus compañeros.
Además, es un jugador que está sabiendo adaptarse bien a la exigencia de jugar en un equipo grande como el Real Madrid. Ni mucho menos le ha pesado el hecho de haber sido un indiscutible para José Mourinho desde el comienzo de la temporada, y aunque aún no ha alcanzado el pico de forma necesario para jugar los 90 minutos de un partido al más alto nivel, sí que parece que está trabajando para lograrlo. Y es que los 3.169 minutos que lleva acumulados en temporada oficial con el Real Madrid así lo atestiguan, y dejan entrever que, a poco que Özil gane un poco de físico, puede convertirse en los próximos años en un jugador imparable.
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