Uno de los dos se tenía que ir

Posiblemente sea la mejor opción para el club y su futuro más inmediato.





En la rueda de prensa de presentación de José Mourinho, ya se notó un ambiente tenso entre ambos, especialmente por el nerviosismo poco habitual que mostraba Valdano, y la expresión más bien fría de Mourinho.  El pasado parecía que no estaba olvidado, tal y como   se ha demostrado finalmente. También habría que añadir algunas perlas que han dejado los dos protagonistas durante el transcurso de la temporada. Sólo hay que recordar las declaraciones de Mourinho con la lista de errores arbitrales que le habían dejado en la rueda de prensa posterior al partido del Sevilla en el Bernabéu, o las declaraciones de Valdano, después del partido contra el Almería, tirándole una puyita a Mou, cuando este quería otro delantero y  dijo que aquel día había uno en el banquillo.

Hago este preámbulo porque me parece importante analizar por qué ha ganado la  batalla Mou. Bajo mi humilde opinión, el luso no había olvidado la afrenta de Valdano, y cuando no se  perdona es muy difícil trabajar al lado de otra persona (todo se analiza con lupa). Hay otros factores que seguramente hayan influido, como el papel que ha jugado Valdano durante estos últimos tiempos como Director General. Muchos todavía no sabemos, o no hemos sabido ver, cuál era su papel exacto dentro del club, a parte del de portavoz. La sensación de ver cuales eran sus diferentes cometidos y funciones como Director General, era bastante intrigante.  Muchas veces, algunos teníamos la impresión de que era un hombre que no decía ni una mala palabra, ni cometía una buena acción ( el descubrimiento y apuesta por Raúl sería la excepción que confirma la regla). Pero tampoco me gusta hacer leña del árbol caído, ya que resultaría bastante fácil, si bien, tampoco se podía ir de rositas. Reconocerle también su educación y compostura exquisitas, aunque en ocasiones hubiera estado bien que diera un golpe encima de la mesa. 

El club ha tomado una decisión difícil, especialmente nuestro Presidente. No era fácil, pero había que actuar. Posiblemente sea la mejor opción para el club y su futuro más inmediato.

Finalmente, Mourinho ya tiene toda la confianza de una manera indiscutible de los responsables máximos del Real Madrid. No habrá nadie que le ponga impedimento alguno a su trabajo.  Se ha apostado claramente por la continuidad de un proyecto deportivo, que esperemos no se quede a medio camino. Además tiene el apoyo incondicional de una gran parte de la masa social del madridismo. Tiene potestad y autoridad moral (al menos de momento) para llevar este transatlántico al puerto de los éxitos. Ahora esperemos que no nos falle. El madridismo ha cerrado filas en torno a él. Esperemos que se acuerde y que lo tenga muy presente siempre, ya que la afición del Real Madrid es tremendamente generosa, pero a su vez muy exigente. Ya lleva un año con nosotros. Creo que ya se habrá dado cuenta de que está en el mejor club del mundo.