Con la destitución de Valdano, el Real Madrid va a adoptar una estructura como club de fútbol muy similar a la de los equipos ingleses, en los que un manager general se encarga de supervisar y controlar todo lo que sucede en la parcela deportiva. Y ese es el papel que va a adoptar Mourinho a partir de ahora. Un ascenso en el club que permitirá a Karanka, hasta ahora segundo técnico del equipo, ganar mucho peso en el seno de la plantilla.
Y es que a partir de la próxima temporada la excepción será ver a Mourinho saltar al césped de Valdebebas o a dar la cara ante los medios de comunicación. Será Aitor Karanka el que lleve a cabo esa tarea. A José Mourinho se le habilitará en Valdebebas un despacho en el que pueda desempañr su labor como manager general, mientras que su equipo de ayudantes, encabezado por Karanka, serán los que estén más cerca de los jugadores en el día a día del equipo.
Karanka será también el que hable en las ruedas de prensa previas y posteriores a los diferentes partidos que tenga que jugar el equipo. Mourinho sólo intervendrá en contadas ocasiones. Y es que Mourinho es consciente de que en el fondo la imagen del Real Madrid ha querado deteriorada tras algunas de sus declaraciones de la pasada temporada, y por ello está dispuesto a exponerse menos de cara a la opinión pública.
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