Kaká llegó al Real Madrid con la etiqueta de primer galáctico de la segunda era de Florentino. 65 millones tuvieron la culpa de que el futbolista abandonara el Milán para recalar en el Santiago Bernabéu. Desde entonces, dos temporadas casi en blanco le han supuesto el cobro de 18 millones de euros. Una cifra que el Madrid no está dispuesto a continuar pagando visto el rendimiento del brasileño.
Muchos han sido los rumores que relacionaban a Kaká con el Chelsea, con el Manchester City, el Inter o el Milán, pero a día de hoy el Real Madrid continúa sin recibir una sola propuesta para el traspaso del brasileño. Oficialmente sólo el Manchester City preguntó por la posibilidad de una cesión, algo que no interesa para nada al club blanco.
La idea del Real Madrid es esperar a que aparezca un comprador o quedarse con el futbolista una temporada más. Por su parte, Kaká espera recuperar su juego en gran medida, aunque reconoce que no está a su mejor nivel. Aún así, el brasileño se niega a rebajarse el sueldo y, según El Economista, habló con Mourinho a final de temporada para pedir una última oportunidad. ¿A la tercera irá la vencida?
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