Por este motivo, Mourinho no ha metido en su nuevo sistema de rotaciones al mediocentro merengue. Por el momento, Xabi Alonso no tiene sustituto en el centro del campo, y a la espera de la recuperación de Sahin, el futbolista de Tolosa ha jugado todos y cada uno de los minutos oficiales de la temporada: seis jornadas de Liga, dos de Champions y los dos encuentros de Supercopa ante el FC Barcelona. Un total de 900 minutos sin descanso sin contar los disputados con la Selección Española, que demuestran que el donostiarra tiene cuerda para rato.
Además, a sus habituales labores de corte y creación de juego, el futbolista merengue añadió en los primeros encuentros del curso una gran pegada, consiguiendo dos goles en apenas tres partidos: el 2-2 del Bernabéu ante el FC Barcelona, en la Supercopa, y uno en la goleada por 0-6 al Real Zaragoza en el debut liguero. Unas cifras a las que añade también tres cartulinas amarillas, que muestran la intensidad del mediocentro en las labores defensivas. El donostiarra se emplea a fondo en defensa, en ataque y en la creación. Es todo un 'Superman', omnipresente en la medular merengue.
Tan vital es su aportación, que cualquier pequeño bajón se nota en el equipo. De ahí los dos malos resultados que se dieron ante Levante y Racing hace apenas dos semanas. Y es que, como todo Superman, Xabi Alonso tampoco es inmune a la 'criptonita', tiene sus momentos de debilidad que se traducen en problemas para el Real Madrid. Pero al igual que los grandes héroes, se levanta cuando los vientos soplan en contra, amenazantes. Y Xabi Alonso promete todavía muchas tardes de heroismo implacable para el Santiago Bernabéu.
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