En el encuentro de la pasada jornada entre Real Betis y Levante, Mario Álvarez duró apenas cinco minutos en el terreno de juego. El zaguero tinerfeño cayó doblemente lesionado al chocarse fortuitamente con Arouna Koné. Mario sufría una brecha en la ceja en la que le tuvieron que poner 14 puntos de sutura y lo más grave, un pinchazo en el gemelo que obligó a Pepe Mel a sacarle del terreno de juego.
Los primeros rumores apuntaban a que podría estar de baja en torno a tres semanas, pero el jugador se ha apresurado a desmentir esa noticia: "Antes incluso de hacer pruebas ya dicen el plazo de baja. Los aficionados ven lo que dicen los periódicos, pero aquí estoy yo para decir que lo de las tres semanas es mentira". Así, el jugador del conjunto hispalense espera poderse recuperar a tiempo y estar en el Bernabéu: "La herida es lo de menos, pero la elongación tampoco me preocupa mucho. El lunes me podré empezar a entrenar con el equipo. Es una alegría para mí no tener nada grave y, en principio, cuento para el Bernabéu ya que el tema de la ceja tampoco me impediría jugar contra el Real Madrid. Estoy reforzando el gemelo para no tener problemas con él", apuntó.
Mario ha sido claro con la forma de jugar que tiene que practicar el equipo bético en su visita al Santiago Bernabéu de la próxima jornada: "En ese partido es importante no perder balones comprometidos y sobre todo intentar cortar esas contras que lanzan. Son jugadores muy rápidos y de gran calidad", sentenció.
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