De los cuatro centrales puros con los que cuenta la plantilla, dos de ellos están lesionados (Carvalho y Albiol), mientras que el tercero (Varane) es muy joven para soportar mucha presión sobre sus hombros. Por ello, Mourinho ha optado por echar mano de Sergio Ramos, un futbolista que en el Real Madrid suele desempeñarse en el lateral derecho, pero que con la selección ya ha venido demostrando que también trabaja bien como central.
De hecho, hay algunos que señalan que el andaluz es mejor como zaguero que como carrilero, algo que está corroborando el jugador en sus últimos partidos en el puesto. La última de ellas, ante el Betis, en la que cuajó una gran actuación y evidenció compenetrarse bien con su compañero Pepe. Una circunstancia que ha repetido este martes ante el Olympique de Lyon, confirmándose como el cuarto central del equipo; mientras que su compañero Arbeloa es el que se está encargando de suplirle en la banda diestra.
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