La victoria madridista en Málaga fue muy clara, 0-4, pero el conjunto de Manuel Pellegrini mereció mejor suerte a tenor de lo visto en la segunda parte. Y es que los andaluces mandaron dos veces el balón al palo, en una acción que Casillas ha visto ya en multitud de ocasiones. En concreto, hasta 146 veces la madera ha salvado al portero madridista de encajar un tanto en partidos de Liga.
Es decir, que en más de la tercera parte de los partidos que ha jugado el de Móstoles en el campeonato nacional (0,34 veces por choque), el palo evitó que encajara un tanto más. Un aspecto que, por tanto, se ha destapado como uno de sus mejores aliados cuando sus paradas imposibles no eran suficientes para evitar el gol. Aunque es evidente que, más que por la madera, su carrera se ha visto protagonizada por su grandes acciones en los momentos clave. Iker siempre ha estado en los instantes en los que se le necesitaba, salvando al Madrid y a la selección con sus atajadas. Es lo que tiene ser el mejor del mundo y, además, ser un hombre con la suerte de cara.
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