El cancerbero valencianista viene arrastrando problemas en el dorso de su mano derecha desde la pasada temporada. Unas molestias que se reprodujeron tras un pisotón involuntario de Fernando Llorente en el encuentro ante el Athletic de finales de octubre, y que el martes fueron a más tras recibir un balonazo en mala posición.
Sin embargo, las pruebas realizadas han descartado una lesión grave, por lo que ha regresado a los entrenamientos para perfeccionar su juego de pies, esperando que la inflamación de los tendones baje progresivamente hasta que pueda volver a ejercitarse con total normalidad. En cualquier caso, los servicios médicos valencianistas esperan que Guaita esté disponible para la visita del Real Madrid a Mestalla.
Una visita que se producirá justo después del parón por las convocatorias internacionales, hecho que ha venido como anillo al dedo a un Valencia que podrá disponer de su portero titular en la competición doméstica.
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