Cristiano nunca se esconde

El delantero marcó y demostró que está en las buenas y en las malas





El delantero portugués lo intentó durante los noventa minutos, dejándose la piel por pelear cada balón y teniendo incluso sus más y sus menos con los defensas locales. Hasta que en el minuto 73 conseguía su gol, un gol que suponía el 0-2 para el Madrid y que espantaba los fantasmas del clásico para el portugués, que con este tanto ve recompensado su interés por estar en la cita copera.

El fin de semana tendrá ante el Sevilla una nueva oportunidad para seguir demostrando su valía. El año pasado, el luso logró nada menos que cuatro goles en la visita del Real Madrid al Estadio Ramón Sánchez Pizjuán (2-6). Esta temporada llega con un extra de motivación tras lo ocurrido en el clásico del pasado sábado, a pesar de haber rebajado su ansia con el gol de hoy, que no hace más que demostrar que su hambre está fuera de toda duda.