Cuando el 11 de Enero de 2007, Higuaín debutaba en un partido de copa frente al Betis, pocos podían imaginar que tan sólo 5 años después ya llevara los mismos goles con el Madrid que un mito del fútbol como Ronaldo.
Los comienzos de Higuaín fueron difíciles, tan sólo 2 goles consiguió en su primera temporada con la elástica blanca. Dificultad añadida fue que vino a sustituir precisamente al propio Ronaldo, pero la garra, la constancia, la fe y las ganas de superarse día a día hicieron que poco a poco Higuaín se ganase el corazón de los madridistas. Fueron dos goles, tan sólo dos, pero claves a la postre. Uno de ellos en el Calderón, y el segundo y quizás todavía el más recordado por la afición madridista, aquél contra el Espanyol que valió la victoria blanca por 4-3 en el último minuto. Ese gol valió probablemente una Liga.
En temporadas posteriores, su rendimiento fue mejorando, si bien siempre parecía que tenía que hacer algo más que sus compañeros para ganarse el puesto. Su gol en Pamplona dió al Madrid, la que es hasta la fecha última liga blanca, y actuaciones con goles en el último instante como ante el Getafe en el Bernabéu metieron al "pipa" en el bolsillo del madridismo.
Con la llegada de Mourinho, el 9 argentino ha mejorado aún más su rendimiento, y aunque alterna titularidad con Karim Benzema, su presencia siempre es clave. Sólo la inoportuna lesión de espalda que sufrió la temporada pasada ha impedido que Higuaín haya superado ya la barrera de los 83 goles. Ésta temporada son ya 17 los goles anotados y tiene pinta que serán muchos más.
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