Europa bien merece un puñetazo

El Real Madrid tratará de hacer bueno el 1-1 de Moscú en el Bernabéu. Todo está a favor de los blancos para que pasen a cuartos de la Champions. Mourinho, eso sí, no quiere la más mínima relajación.





Si echáramos la vista atrás y miráramos cómo estaba el Real Madrid por estas fechas hace 365 días nos daríamos cuenta de que algo ha cambiado. Por aquel entonces, el equipo de Mourinho venía de empatar a un gol en el partido de ida de los octavos de final. Curiosamente, el mismo panorama que un año después se le vuelve a presentar a Mourinho y sus chicos. Sólo cambia el rival, el CSKA por el Lyon y, sobre todo, la sensación. El año pasado el madridismo vivía con la psicosis de la historia moderna de no pasar en los últimos tiempos de octavos de final en la máxima competición continental. Ahora, con esa barrera derribada, el favoritismo, que no la confianza, hace que el Real Madrid tenga manga ancha de optimismo para pasar a cuartos de final.

REAL MADRID: Casillas, Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Marcelo; Xabi Alonso, Khedira; Ozil, Cristiano Ronaldo, Higuaín y Benzema.

CSKA MOSCÚ: Chepchugov; Vasily Berezutsky, Ignashevich, Alexei Berezutsky, Shchennikov; Wernbloom, Mamaev; Dzagoev, Honda, Musa; y Doumbia.

ÁRBITRO: Stéphane Lannoy (FRA).


ESTADIO: Santiago Bernabéu.

HORA: 20.45 (TV Autonómicas)

Después de ver el partido de Moscú, y con la lógica en la mano, el Real Madrid debería pasar por la puerta grande. Incluso, debería golear a los rusos. Si dejamos de lado lo ‘normal’, el CSKA demostró que es un equipo corriente pero que no se rinde, y eso siempre lleva peligro. Por eso, Mourinho quiere que sus jugadores tengan tensión desde el primer segundo, que no se dejen arrastrar por la corriente de favorito que le acompaña. Sólo de esta forma la normalidad, el triunfo del Real Madrid, se hará posible.

Es muy probable que Mourinho inicie el partido con Higuaín, Cristiano Ronaldo y Benzema en el equipo titular. Contando con la baja de Callejón, sorprende por su buen rendimiento, lo normal sería pensar en que Kaká podría empezar en el banquillo. Mourinho no quiere sorpresas, y atar en corto los posibles contragolpes rusos con tres centrocampistas puros, puede ser el mejor antídoto. Sea de una u otra forma, y siguiendo con los tópicos, el Real Madrid debe estar esta noche a las 22.30 en los cuartos de final de la Champions. Hoy no se esperan heladas, ni césped artificial ni nada por el estilo. Todo está a favor para acercar al madridismo un bonito viaje por el mes de mayo a la ciudad de Múnich.