Y es que el argentino no tuvo reparos en el día de ayer, en hacer la pelota descaradamente a su entrenador Guardiola. El jugador del Barcelona tuvo que responder a la misma pregunta que Cristiano Ronaldo, sólo que el argentino lo hizo con bastante menos elegancia: "El más importante es el míster Pep Guardiola", dijo Messi.
El futbolista azulgrana prefirió darle jabón a su entrenador, antes que ser leal al club que le ha dado de comer todos estos años. A pesar de esto, desde Barcelona y desde la prensa antimadridista seguirán destacando la humildad de Messi y el egoísmo de Cristiano.
No obstante, poco a poco se va descubriendo la verdadera cara del entrenador y los jugadores del Barcelona; una cara mucho más cerca de la soberbia que de la humildad. Eso sí, nos seguirán vendiendo que Mou y Cristiano son los malos, y Pep y Messi los buenos, aunque aquí eso no cuela.
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